martes, 15 de febrero de 2022

Día 2: El bidón de gasolina

 

¡¡Hola de nuevo!!

En esta nueva entrada de mi blog me gustaría exponer un caso concreto de discriminación que presencié hace tiempo, quizás no sea muy llamativo, pero recuerdo perfectamente cómo nos hizo sentir a todas las que lo presenciamos.

Sería sobre el año 2008/2009, yo estaba estudiando en Lugo y un día decidimos unas cuantas compañeras de clase quedar por la noche para ir a tomar algo. Una de ellas, a la que llamaré Rosa, estaba en contra de ir “de pubs”, decía que era mejor quedar en un piso, que íbamos a tener problemas, etc. La verdad es que no le hicimos caso, pensábamos que simplemente no le gustaba la música que solían poner en estos locales.

Cuál fue nuestra sorpresa cuando al intentar entrar en el primero, el portero nos deja pasar una a una, pero detiene a Rosa en la puerta. Al darnos cuenta salimos a ver qué estaba pasando… Lo único que nos decía el portero era que Rosa no entraba a no ser que le dejara revisar el contenido de su bolso, todas nos sorprendimos ya que a ninguna nos había exigido tal cosa, pero Rosa, por no separarse del grupo accedió a regañadientes. El portero, no contento con lo que había en el interior del bolso de mi amiga (o más bien con lo que no había), pues dijo que pensaba que llevaba un bidón de gasolina…finalmente sentenció que mi amiga no podía entrar, sin darnos ninguna otra explicación. Ante esta actitud lo que hicimos finalmente fue no entrar ninguna en el pub e irnos a casa comentando por el camino lo que nos había pasado. La mayoría estábamos atónitas, sin creernos de todo lo que había pasado, otras decían que se lo esperaban, que Lugo es como un pueblo grande.

De locos, ¿no?

Supongo que si llegasteis leyendo hasta aquí os estaréis preguntando qué tipo de trato discriminatorio sufrió Rosa, pues bien, en este caso creo que estaríamos ante una discriminación por error (aunque no lo tengo muy claro). Aclararé un par de puntos a ver si estoy en lo cierto o no.

Rosa era una chica de la misma edad que el resto de nosotras pero lo que la diferenciaba era su estética: llevaba rastas, piercings en la cara y vestía con ropa floja y muy colorida. He de añadir que estoy hablando de un pub pequeñito que no contaba con código de vestimenta como podríamos imaginarnos en grandes locales de ciudades. El motivo por el que creo que se trata de discriminación por error me lo da “el bidón de gasolina”, el portero al ver la apariencia de mi amiga pensó que hacía malabares por las calles con antorchas, pero pese a comprobar que no llevaba material inflamable encima decidió no dejar que entrara en el local, lo que me hace sospechar que debía de existir algún otro motivo de discriminación latente que aún hoy en día no llego a comprender.

Por suerte hoy en día estos prejuicios y estereotipos asociados con la indumentaria de la gente se van disipando poco a poco, pero aún queda un largo camino hasta que dejemos de escuchar las típicas frases “prefabricadas” sobre si un grupo de gente no se lava y son unos vagos, si otro grupo adora a Satanás por vestir siempre de negro, o si alguien por vestir de una forma determinada lo único que quiere es llamar la atención.

Y hasta aquí mi aportación al reto, espero que os haya gustado y que si lo veis conveniente me ayudéis a encuadrar bien el tipo de discriminación que presencié.

Buenas noches.

4 comentarios:

  1. Debo confesar que es un estereotipo que a mí me cuesta sacar de mi mente por tantos años de escucharlo en la infancia... y eso que a mí me encanta la ropa hippie!! pero a veces sin querer se asocia ciertas imágenes a gente sucia o a gente problemática y más de una vez me he tenido que dar una colleja mental y decirme: espabila...
    Gracias por tu entrada!!

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    1. Ese es el problema, que llevamos toda la vida escuchando ciertos comentarios que aceptamos muchas veces sin cuestionarnos la veracidad de los mismos...lo bueno es que poco a poco las cosas van cambiando y mejorando.
      Muchísimas gracias por leerme y por tu comentario.

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  2. Muchas veces la apariencia física nos produce rechazo, son prejuicios, detrás de ese aspecto inicial hay gente maravillosa

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    1. Pues claro que sí, ni el que viste distinto es necesariamente mala persona ni por el contrario todos los que "no se salen del molde" son buenos.
      Muchas gracias por tu comentario, me hace mucha ilusión ver que alguien me lee.

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